lunes, 7 de septiembre de 2009

H2O (por poner algo...)

Me falta el aire y no puedo respirar, y no creo que sea sólo por el constipado. Aveces creo que debería haber nacido como criatura marina, tal vez como tortuga marina o haber tenido branquias o, aun mejor, agallas.

Agallas, agallas, agallas...

Agallas, sinónimo de valentía, para mirar dentro de mi y saber que es lo que en realidad siento... Estoy confusa y tengo miedo, no me atrevo a enfrentarme a mi misma porque creo que se lo que encontraré dentro de mi. Porque... Si tengo dudas sera por algo, ¿no?

Supongo...

Por eso tengo ganas de meter la cabeza debajo del agua y poder respirar. Ser capaz de aprovechar el oxígeno existente en el agua y... no tener que sacar fuera la cabeza.

Cobarde, cobarde, cobarde...

Para sólo concentrarme en las moléculas de agua que me rodean. Para no pensar.

Me cuesta mucho dormirme, desde siempre. Cuando era pequeña me decían que dejara la mente en blanco y, así, me dormiría. Yo, ingenua de mi, me imaginaba una pared en blanco y me decía que eso era la nada. Pero sabía que la nada no debía de ser blanca (que es la suma de todos los colores), en todo caso sería negra, como los agujeros negros (por algo que había leído de que en ellos no había materia, o algo así...) o como la nada de La historia interminable... Y eso no me ayudaba mucho a dejar de pensar y conseguir dormirme.

Nunca he sabido dejar la mente en blanco. Y lo sigo necesitando, ahora más que nunca.

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